Familias dentro de nuestra familia espiritual
Tu historia de San Cayetano nos importa

La Familia Molina-Escorza
En esta ocasión queremos presentarles a la familia Molina Escorza. Llegaron hace varios años de Ignacio Zaragoza, Chihuahua. Aunque venían con una maleta llena de ilusiones laborales, nunca abandonaron sus principios en la fe. Se conocieron y formaron una linda familia, al mismo tiempo pasaron de ser católicos de domingos a profundizar fervientemente en esos principios de la fe en nuestro Señor y el amor a la siempre Virgen Maria, en la advocación de la Virgen de Guadalupe.
Corría el año 2018 donde ella empieza las clases del catecumenado y el para la confirmación. Ese tiempo fue sin duda alguna donde ellos empiezan atender el llamado de Dios a entregarse al servicio de Él.
Hoy en día coordinan el grupo de Renacimiento Evangelizador, todos los jueves de 7-9 de la noche (todos están invitados). Sirven con sus hijos, como Ministros Extraordinarios de la Eucaristía, también participan en el misterio de proclamadores de la Palabra (Lectores), y coordinan la Misa de todos los domingos de 4:30pm. Además, participan al cien por ciento en todas las actividades Parroquiales, son catequistas. Dalia trabaja en nuestra oficina y sin duda alguna son una familia con quienes se puede contar en todo momento.
Como Parroquia de San Cayetano, nos sentimos bendecidos de que Clover Molina Dalia Escorza, Nayeli Molina y Fernando Molina, sean parte de nuestra familia espiritual.

La Familia Sanchez
Somos Luis y Maribel Sánchez, tenemos dos hijas Elizabeth y Samantha. Nosotros tenemos ya más de treinta años de ser parte de San Cayetano. Llegué a esta parroquia desde niña y poco a poco me fui involucrando en ser parte de esta comunidad. Al integrarme al grupo juvenil que coordinaban las Hermanas de La Caridad de María Inmaculada, sentí ese llamado de servir como proclamadora de la palabra y Ministro Extraordinario. Luis se integró a la parroquia y empezó a servir como lector y ministro cuando éramos novios. Nos casamos en esta parroquia en 1995 y después hicimos un retiro de iniciación cristiana en 2003. Empezamos a ser parte del grupo Jóvenes Para Cristo. En ese grupo profundizamos nuestro conocimiento de nuestra fe católica. Esta experiencia nos ayudó para después ayudar a iniciar el grupo del Encuentro Matrimonial Mundial con otros matrimonios de la parroquia. Por medio del Encuentro Matrimonial hemos aprendido a valorar y a entender el sacramento del matrimonio y la vida sacerdotal. Nuestras hijas de chiquitas fueron miembros del coro de niños. Ya de grandes siguieron siendo parte del coro hasta el año pasado. Hoy en día también servimos como catequistas. Le damos gracias a Dios por tantas bendiciones que nos ha dado al ser parte de esta comunidad y también por los retos que hemos tenido que nos han ayudado a valorar y a crecer en nuestra fe.